viernes, octubre 15, 2010

708 EMPRESARIOS FIRMARON ACUERDO DE ÉTICA EMPRESARIAL

Concluyó el Cuarto Foro de Ética Empresarial y más de 2.154 empresarios representados en 1.226 empresas de Ibagué, Bucaramanga, Pereira, Medellín, Villavicencio, Barranquilla, Paipa, Cartagena, Cúcuta, Pasto, Neiva, Cali y Bogotá, asistieron para firmar un compromiso para la puesta en marcha de los Principios Éticos del Empresariado Colombiano, destaca Fernando Jaramillo Giraldo, vicepresidente de Asuntos Corporativos de Bavaria.
En el cuarto Foro de Ética Empresarial se destacó la importancia de la transparencia en los negocios como una condición de evolución y respeto por el trabajo de todos. En el que cada día se debe “educar la conciencia” en principios, valores y virtudes que permitan lograr la confianza empresarial que el país necesita.
El 75% de la opinión pública mundial considera que hacer negocios en Colombia es bastante riesgoso, no tanto por razones de seguridad sino especialmente por razones de corrupción. Según investigaciones de Transparencia Internacional, Colombia, con una calificación de 3.5 sobre 10, ocupa el puesto 65 entre 140 países considerados corruptos tanto en sus instituciones públicas como privadas.
La exigencia del mundo empresarial para la evolución de las naciones es que cada día exista más confianza entre las partes y esta debe construirse desde lo más íntimo: ser mejores personas, para ser mejores empresarios y de esta manera tener un mejor país, destaca Hugo Alberto Niño, director Académico del Instituto Latinoamericano de Liderazgo en Bogotá.
La falta de ética es un camino al abismo. Esta es la conclusión a la que llegaron los 708 empresarios que firmaron el compromiso de ética empresarial como una declaración para generar mejores condiciones laborales al interior de sus organizaciones, con sus proveedores, con su competencia y con su entorno en general.
Las nuevas tecnologías, la presión competitiva, los desequilibrios socioeconómicos, los desajustes ambientales y la reducción de los índices de gobernabilidad imponen una reingeniería en las orientaciones y un rediseño de los esfuerzos. La ética surge como el eje de las conductas individuales necesarias para que las organizaciones asuman el compromiso de crear las condiciones para que la convivencia, la supervivencia y la vida recuperen su sentido primigenio.
Hacer el bien es tan antiguo como el hombre mismo. La sostenibilidad de las naciones está en la manera de asumir sus responsabilidades basados en el bien común y de esa manera se pueden hasta hacer mejores negocios, sostiene Jaramillo.