jueves, mayo 15, 2014

Segundo año del TLC con Estados Unidos

El 15 de mayo se cumplieron dos años de la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio entre Colombia y Estados Unidos, en el contexto de una economía mundial extenuada y varios rezagos internos que representan obstáculos directos para un mejor aprovechamiento del acuerdo por parte del país.
Las últimas estimaciones del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo señalan que Colombia conserva una balanza comercial superavitaria con Estados Unidos, que en términos FOB suma 7.125 millones de dólares, a pesar de que esa nación ha disminuido sus importaciones a nivel global y ha registrado un crecimiento económico bajo.
En materia de exportaciones, Colombia ha llevado sus productos y servicios al mercado americano por valor de 32.2 mil millones de dólares durante los primeros 20 meses de vigencia del TLC; un 3.4% menos que las percibidas entre mayo de 2010 y diciembre de 2011. De acuerdo con el Ministerio, este decrecimiento se deriva de factores como el descenso de los precios en el mercado internacional de productos relevantes para la oferta exportadora colombiana como el carbón, el níquel, el café y las flores. No obstante este fenómeno, las exportaciones industriales y agroindustriales colombianas crecieron 2.4% en dicho periodo y las agroindustriales, en las que el país tiene gran potencial, presentaron un aumento del 6.9, según reporta el Ministerio.
En el marco del tratado, las importaciones colombianas de productos americanos crecieron en un poco más del 27%. Esto, afirma la oficina de la Viceministra de Comercio Exterior, Claudia Candela, era previsible teniendo en cuenta que Estados Unidos está aprovechando su nuevo acceso preferencial al mercado colombiano, lo que contrasta con lo que sucede con la oferta exportable colombiana, que ya tenía acceso preferencial al norte por las ventajas que ofrecía la Ley de Preferencias Arancelarias Andinas (ATPDEA).
De estas importaciones, más del 90% son bienes de capital, materias primas y bienes intermedios y el 80.7% de ellas son bienes no producidos en Colombia, lo que se traduce en un bajo nivel de competencia en términos globales para la producción colombiana y en dinámicas de sustitución de proveedores extranjeros. En palabras de Eduardo Muñoz, director del Centro de Aprovechamiento de Acuerdos Comerciales del gobierno nacional, “las canastas exportadoras de Colombia y Estados Unidos ni son similares ni compiten entre sí. Esto significa que nuestras economías tienen estructuras productivas diferentes y, por tanto, surgen oportunidades de complementación y de una mayor integración que beneficie a ambas”.