miércoles, julio 15, 2015

Comunicado de Prensa ASOLECHE Colombia requiere producir más leche y más barata

Para terminar de una vez por todas con las estacionales “enlechadas”, que perjudican al sector lácteo, desde su mismo origen, se requiere definir medidas estructurales, que se mantengan en el tiempo, y que constituyan una política láctea integral, que permita garantizar la estabilidad del ganadero productor de leche y el crecimiento en ventas de la industria láctea tanto en el mercado interno como en el externo. 
“Más allá de la discusión sobre el precio de la leche, que tanto ha desgastado a ganaderos e industriales, debemos comenzar a pensar en el cumplimiento de metas concretas de incremento del consumo interno y de las exportaciones”, manifestó Jorge Andrés Martínez, Director Ejecutivo de Asoleche. “Para lograrlo, debemos enfocarnos en cómo producir más leche y más barata, pues de lo contrario la competencia internacional nos dará un golpe fuerte”, puntualizó el directivo. 
Propuestas en discusión tales como la garantía de compra de la producción nacional, la estructuración de un mecanismo parafiscal eficiente, o el enfoque exportador lácteo, han sido planteadas por Asoleche, como elementos de una política láctea integral, que responda a la problemática del sector lácteo colombiano: alta informalidad, costos de producción crecientes y baja asociatividad. 
Garantía de compra de la leche. Debe ser un proceso gradual, pues la mitad del mercado lácteo se encuentra en la informalidad. Esta propuesta requiere de elementos paralelos, uno de ellos es un precio competitivo para algún porcentaje de la leche, que permita el proceso de formalización gradual. Con precios altos y regulados para toda la cosecha, va a ser imposible lograr este objetivo. “Lo importante aquí es lograr un acuerdo de cadena junto con el Minagricultura, y definir para dónde vamos”, afirmó Martínez.    
Fondo tripartito: tres principios fundamentales. La propuesta de un fondo lácteo, con nuevos aportes de ganaderos, industria y gobierno, se encuentra en discusión y es un instrumento de política pública que debe cumplir con tres principios fundamentales: primero, un esquema de gobernanza claro y con la participación real de todos los actores involucrados; segundo, definición precisa de la inversión de los recursos; y tercero, contar con un mecanismo técnico para su operación.  

“La solución a la problemática láctea no se encontrará en un solo instrumento de política, sino en la conjunción de los componentes de una estrategia de cadena, que incluya asistencia técnica (que permita producir más leche y más barata), crédito para pequeños productores y reducción de costos de producción”, puntualizó Martínez.